Tailandia es un destino que combina joyas culturales y entornos naturales inolvidables. Mientras que su seductora capital, Bangkok, cautiva al visitante con templos y palacios reales y rascacielos de vértigo, en otras zonas menos conocidas del país se encuentran antiguas ruinas y ciudades como Sukhothai, ríos y parques nacionales ideales para aventurarse al aire libre y deliciosa gastronomía local, que permite disfrutar la Tailandia más auténtica.