Este libro, escrito por uno de los mayores especialistas mexicanos sobre la divulgación del conocimiento técnico a los productores del campo, recoge también la experiencia de numerosos especialistas que participaron durante el auge del extensionismo mexicano hasta su desmantelamiento final en la década de los años ochenta. Entre los temas que se abordan están: La relación entre los recursos naturales y lo que puede conseguirse de ellos poniendo la ciencia y la tecnología al alcance de los productores. El florecimiento de la investigación agrícola, que pasa por la Oficina de Estudios Especiales, la creación del Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas y otros institutos institutos nacionales; la creación del Centro Internacional para el Mejoramiento de Maíz y Trigo, la Revolución Verde; y el impacto de todos ellos sobre la producción de alimentos en México. ¿Por qué Extensión Rural y no Extensión Agrícola, que es la denominación más común, mente usada? En palabras del autor: porque si buscamos un desarrollo social y económico de los pequeños productores, tendrá que estar basado en la actividad agrícola y ganadera, pero su objetivo no puede quedar ahí, necesitará, en forma organizada o individualmente, insertarse en otras actividades como la comercialización, la industrialización, la compra venta de insumos o el desarrollo de actividades y habilidades que pueden ser englobadas en el término Desarrollo Rural.