No es comprensible la historia de la península ibérica en la Edad Media sin su contexto mediterráneo, en el que el modelo de organización política era el Imperio, y no el "Estado-nación" tal y como se desarrollaba en partes más septentrionales de Europa. Partiendo de estas premisas, el conjunto de artículos aquí reunidos ofrece una serle de reflexiones sobre tres aspectos específicos de la España medieval: los fundamentos y la práctica del poder real, la importancia concedida a la difusión del saber como deber de los reyes, y el concepto de nobleza con sus implicaciones sociales y ontológicas.