Francesca Pembroke ha quedado viuda y Arthur Robards, es un joven aristocrático, enviado a la guerra para luchar por su país. Herido huye a una montaña lejana y es encontrado por Francesca quien lo acoge y cuida. El amor y la pasión entre ellos es imposible de evitar, surgiendo un amor prohibido... lo que para Francesca se convierte en su más preciado secreto. Años más tarde, Madeleine Robards con gran inquietud, descubre el diario de su madre, acompañado de unas cartas amarillas, que tras leerlas cambiarán el rumbo de su vida