El cristianismo se iniciÃ3 con las prÃ(c)dicas de Pablo de Tarso en Asia Menor. Con el teimpo, se fue adaptando a las oportunidades que ofrecÃ-a el momento histÃ3rico, empezando por soltar el lastre del judaÃ-smo y del Apocalipsis, para adquirir las formas externas de la liturgia del Imperio Romano y, màs tarde, para adecuarse a las formas sociopolÃ-ticas del mudno occidental.