Uno de los objetivos de la presente publicación es mostrar el proceso de liberación y de reafirmación de una identidad personal y literaria de Flora Tristán. En este sentido, presentamos no solamente Necesidad de dar una buena acogida a las mujeres extranjeras, por primera vez en español, sino también un texto judicial que hemos titulado Memorias de una separación y que muestra cómo mientras la autora consolidaba un nombre literario, en paralelo, en las instancias judiciales, seguía siendo la «señora Chazal», una mujer que, de acuerdo con la legislación de la época, debe obediencia a su marido.