Deambulan entre nosotros, se cruzan a nuestro paso, nos siguen sin rumbo fijo; son parte del paisaje urbano y pueblerino de nuestro territorio. Abandonados, sucios, y en ocasiones hambrientos, los quiltros (nombre dado al mestizaje perruno criollo), no tienen que someterse a la disciplina de una mascota, por lo que cualquier rincón es bueno para detenerse y ver pasar la vida. Son los quiltros, y una vez reconocidos por el olfato de Bogus y el lente de Rakar, sólo queda espacio para seguir sus pisadas. Acompañemos a estos dos viajeros errantes por los rincones y parajes de la zona central de Chile , y descubramos a través de ellos algunos de los rasgos característicos de nuestra identidad nacional