Carlos França fue un pastor evangélico de gran prestigio entre los cristianos de su comunidad, por ser elocuente en sus sermones y por convencer fácilmente a los oyentes a convertirse al cristianismo, fue elegido y separado en poco tiempo como converso para ejercer su ministerio pastoral, haciendo fue blanco de persecuciones por parte de otros obreros dispuestos a ocupar el mismo cargo eclesiástico y por la envidia que ardía en su alma atormentada al verlo crecer casi instantáneamente, mientras ni sus superiores los recordaban. Y eso resultó en la tormentosa persecución que destruyó su reputación, provocando que perdiera a su familia y viviera varios años en la oscuridad, sin embargo, conoce a alguien que lo ayuda a salir del fondo y tiene la oportunidad de reiniciar su ministerio y convertirse en el líder cristiano más grande de su tiempo.