La idea incandescente pretende imbuir al lector en el mundo del amor, del desamor, de las relaciones intimas humanas y del deseo, que constituyen el avatar de las vidas de todos, alejandolo durante unos instantes, el de la lectura de cada poema, del mundo material y superficial que lo impregna todo. Expresar con versos reflexionados ideas y pensamientos que consciente o inconscientemente pasan por nuestras mentes. La poesia, otra vez, junto a la leal predisposicion de quien la lee, constituye aqui una via de escape y reflexion donde el pensamiento y lo inmaterial han de enriquecer, como cualquier arte, al ser racional que somos todos. Espero minimamente vislumbrar, aunque sea de lejos, dicha meta.