Hasta hace poco tiempo, el amor pertenecía al reino de los poetas, artistas y filósofos. En las últimas décadas del siglo XX, ha sido estudiado desde múltiples perspectivas científicas. Entrelazando datos de distintas disciplinas, Michel Odent puede ofrecer evidencias de que el corto pero crítico período de tiempo que sigue al nacimiento tiene consecuencias a largo plazo y en él está involucrada la capacidad de amar, que incluye el amor a la Madre Tierra.