Nuestra dependencia del petróleo es enorme. Es el símbolo de una época iniciada a finales del siglo XVIII. Hoy, los derivados del petróleo representan en torno al 40% de toda la energía primaria consumida por lo seres humanos, y cerca del 95% de la empleada en el transporte mundial, lo que otorga al oro negro un papel estra tégico de primer orden. Pero dos factores impiden que la era del petróleo pueda seguir