El erotismo constituyó, un problema filosófico esencial, debido a que, sin dejar de ser una actividad estrictamente humana, nos pone de frente, constantemente a nuestra naturaleza animal. Esta obra escrita entre los años de la segunda guerra mundial y 1957, es, sin duda, uno de los textos fundamentales de su autor y representa una especie de compendio de los temas que siempre le fascinaron: la íntima vinculación de amor, pasión y muerte, el significado de la transgresión o la turbadora relación entre la voluptuosidad y la santidad. Cierra esta indagación sobre lo erótico una serie de estudios dedicados a las variadas representaciones del sadismo, el enigma del incesto o la sensualidad del misticismo.
"Un brillante libro por uno de los pensadores más fascinantes del siglo XX"
Gabriel Herrera Lunes 31 de Mayo, 2021"Fantástico"