reseña: esta obra se ocupa de las relaciones entre el arbitraje y la judicatura, con el fin de identificar aquellos aspectos en los que se interceptan una y otra modalidad de resolución de conflictos e incidir así, de un modo fundamental, en el entendimiento de nuestro actual orden jurídico. primeramente se presentan las características más sobresalientes del arbitraje, para después explorar la manera en que los principales procesos de jurisdicción nacional, así como algunos llevados a la cci, operan en relación con el arbitraje. el autor se pregunta si las relaciones entre la judicatura y el arbitraje son de control o asistencia. la respuesta que ofrece es que ambas calidades se satisfacen, teniendo a la asistencia como regla general y al control como excepción. las razones que lo llevan a sostener tal afirmación son el diseño del propio régimen arbitral, su historia legislativa, la naturaleza del instrumento y la experiencia que su uso ha acumulado. lo que plantea a lo largo de estas páginas es que existen formas adecuadas de convivencia entre las dos maneras de resolución de conflictos y que la arbitral no debe sufrir las consecuencias de ´´predominio´´ de la jurisdiccional. sin dejar de constatar la importancia enorme de esta última en todos los aspectos, su argumento va en el sentido de considerar que cada una de ellas debe ser tratada en su propio contexto y a partir de categorías diferenciadas.