Con el advenimiento de la tecnología que ha permitido el desarrollo de aditamentos cruciales en el manejo de la vía aérea, como la oximetría de pulso y la capnografía, se ha logrado detectar eficazmente los problemas de ventilación e instrumentación. De este modo, mediante una mascarilla laríngea, se pueden manejar situaciones difíciles de instrumentar, consiguiendo una adecuada oxigenación e iniciando el uso de los aditamentos supraglóticos que han modificado la morbilidad en los pacientes con vía aérea difícil. Actualmente tenemos una visualización completa y adecuada en casos con dificultad en el manejo de la vía aérea, y se hace posible la instrumentación mediante aditamentos especiales, evitando el daño y permitiendo la intubación endotraqueal. Con tecnología asociada a algoritmos especiales de manejo se ha intentado para fines de enseñanza mostrar los pasos a seguir en situaciones adversas, ayudando a disminuir los casos de morbilidad y mortalidad. El entrenamiento de un equipo que esté familiarizado con el manejo de la vía aérea y la oxigenación es el único método para evitar el caos en una situación de urgencia.