Algunas enfermedades modernas que aún nos ocultan secretos, como determinados tipos de cáncer, la diabetes, los trastornos cardiovasculares, el deterioro cognitivo, el síndrome del intestino irritable, el asma o las reacciones auto inmunes, tienen en común su relación con un desequilibrio que afecta a la red linfática. El sistema linfático —ángel y demonio a la vez— garantiza la depuración de nuestro organismo, pero con mucha frecuencia está en la raíz de ciertas enfermedades causadas por los desequilibrios que entraña nuestro estilo de vida. Descubierta por los más destacados médicos griegos de la Grecia antigua, la linfa regresó a principios del siglo XXI al primer plano de interés de la comunidad científica. Este libro, redactado desde un punto de vista inmunológico y fundamentado en los recientes descubrimientos de los procesos de propagación de la inflamación, expone el proceso necesario para depurar la linfa antes de ponerla en movimiento, ya que, de lo contrario, los problemas originalmente localizados en un solo órgano podrían extenderse por todo el cuerpo.