Selección de cincuenta y siete cartas de la amplia correspondencia que Camille Pissarro mantuvo desde 1883 hasta su muerte en 1903 con su hijo primogénito Lucien, también pintor. En ellas se revela la experiencia vital y artística del pintor, contada en primera persona y sin pose alguna; sus opiniones políticas y sus reveses de la vida cotidiana, con especial mención a sus inquietudes y convicciones como exponente del movimiento impresionista, del que fue figura paternal y aglutinadora. La edición también incluye manuscritos originales, bocetos y apuntes técnicos, así como las obras del artista aludidas en esta correspondencia. Un total de cincuenta y tres citas ilustrativas que aportan valor documental y visual a la obra.