Carta al Padre cuestiona, indaga, afirma, niega, busca a través de su expresión profunda y dolorosa, desentrañar los inextricables recovecos que la figura paterna ha dejado en el alma de un Kafka atormentado y desilusionado, pero que, con un ánimo conmovedor, trata de desenmascarar y desenterrar los fantasmas infantiles que lo agobian sin cesar a lo largo de su vida.
"Buena eidición, la entrega en los tiempos establecidos"